El impacto medioambiental de las velas convencionales y cómo reducirlo
El lado oculto de las velas convencionales
Encender una vela parece un gesto inocente, pero muchas velas convencionales están hechas con parafina, un derivado del petróleo.
Durante la combustión, liberan partículas tóxicas y compuestos químicos que afectan tanto al medio ambiente como a la calidad del aire en casa.
Además, su producción requiere energía no renovable y contribuye a la contaminación del agua y del suelo.
Las velas industriales suelen venir en envases de plástico o vidrio de un solo uso, lo que aumenta aún más su huella ecológica.
El impacto medioambiental de la parafina
La parafina proviene del refinado del petróleo, un recurso limitado y altamente contaminante.
Durante su uso, emite hollín negro, formaldehído y otras sustancias nocivas que pueden permanecer en el aire y las superficies del hogar.
En el proceso de producción, la extracción y el transporte del petróleo generan emisiones de CO₂, pérdida de biodiversidad y derrames contaminantes que afectan a los ecosistemas marinos y terrestres.
Cómo reducir el impacto
La buena noticia es que puedes seguir disfrutando del ambiente cálido de una vela sin dañar el planeta.
Aquí tienes algunas alternativas sostenibles:
- 🕯️ Elige velas de cera natural, como soja libre de GMO, colza o coco.
- 🌿 Opta por envases reutilizables, como cemento o cerámica.
- ✨ Evita mechas con plomo o parafina. Busca mechas de algodón o madera natural.
- ♻️ Reutiliza tus envases vacíos. Usa los recipientes como portavelas, macetas pequeñas o joyeros.
- 📦 Compra local y artesanal. Reducir transportes significa menos emisiones de CO₂.
El compromiso de Casa Nordlys
En Casa Nordlys elaboramos velas con cera de soja libre de GMO, vegana y sostenible, hecha con materias primas de origen nacional y de Km 0.
Nuestros envases de cemento y arena de cuarzo son duraderos y pensados para tener una segunda vida después de que la vela se consuma.
Además, hemos reducido el uso de plásticos en nuestros envíos y utilizamos chips de almidón de maíz biodegradables, que pueden tirarse al orgánico o usarse como fertilizante natural.
Creemos que los pequeños gestos cuentan, y que cada vela puede iluminar un poco más un futuro sostenible.